¡Hola,
mentecillas inquietas!
No
creo que haga falta actualmente hacer una semblanza biográfica sobre
Greta Thunberg. A grandes rasgos quien más y quien menos que no haya
estado viviendo en una cueva ha ido teniendo desde agosto de 2018 a
esta chica hasta en la sopa. Primero por su personal huelga escolar
por el clima en las puertas del parlamento sueco, luego por toda la
atención mediática y apoyo popular que esto atrajo, luego por
acabar rápidamente convertida en nueva lideresa del movimiento
ecologista, después porque se conoció que sufre Síndrome de
Asperger, luego por su intervención en la ONU, ahora por el COP25 y
la manifestación en Madrid y, en medio de todo esto, por haberse
visto en el ojo del huracán por los odios de unos, la entronización
de otros, las dudas de los de más acá...
Y
todo esto en menos de año y medio mientras cumplía dieciséis años.
Es clásico cuando irrumpe una personalidad en la escena pública que
desate pasiones, a favor y en contra. Es típico, además, que esto
ocurra cuando se habla de un tema como el del Cambio Climático (yo
lo extendería directamente a todo el movimiento ecologista en
general) en el que tampoco hay tanto consenso como pueda creerse a
simple vista.
Greta
ha sido catapultada en muy poco tiempo y con muy poco análisis a la
categoría de Virgen del Ecologismo, como si de la cuarta advocación
de Santa Petra Kelly se tratara (quien no sepa quién es Petra Kelly
está invitado a tirar de Wikipedia y luego puede seguir leyendo). De
hecho, no es fortuito que mencione en este artículo a Petra Kelly,
porque es una referencia tangencial a que el movimiento ecologista no
nace con Greta Thunberg, su huelga escolar por el clima, sus viajes
en catamarán all around the world, sus mencionadas características
neurobiológicas y todo lo que la engloba y acompaña. El movimiento
ecologista lleva gestándose en estado embrionario al menos desde que
pudieron verse los efectos de la radiación con las bombas de
hidrógeno y las bombas atómicas en los años 40 y 50, y más
adelante con la concienciación del problema que supone la producción
en masa e indiscriminada de energía nuclear (es ahí donde entra en
juego Petra Kelly, Die Grünen y muchas personas, entidades y
organizaciones más). Es más, hay un artículo de Manuel Ansede para El País que demuestra que el movimiento ecologista unido indisolublemente al movimiento obrero lleva siendo una realidad al menos desde finales del s. XIX. Aquí dejo el enlace.
https://elpais.com/elpais/2017/06/20/ciencia/1497980686_330474.html
https://elpais.com/elpais/2017/06/20/ciencia/1497980686_330474.html
Dejemos
de momento el caso de Greta para centrarnos en el caso contra
Greta y quizá podamos entender
todo el mapa mucho mejor. Hace pocos días circulaba de forma viral
un vídeo en el que se comparaba maliciosa, falaz, capciosa y
tendenciosamente a Greta Thunberg y su lucha con el caso de un joven
llamado Boyan Slat. Este chico ha creado un sistema que aprovecha las
fuerzas naturales de los océanos y mares tales como vientos y
corrientes para desarrollar una tecnología que limpie de manera no
agresiva las aguas de plásticos. En el vídeo se hace una violenta
comparativa constante desde un enfoque claramente boyanista
y marcadamente anti-gretista
en un claro y descarado afán por enfrentar dos posturas, ponerlas en
conflicto y decir "así no. Así sí".
Este
es el enlace del vídeo porque vais a contextualizar el artículo
mucho mejor si lo veis antes de continuar (¿Habéis mirado ya lo de
Petra Kelly y Die Grünen, por cierto? Qué de deberes pongo. Cómo
se nota que voy para profe)
Imagino
que ya lo habéis visto. Continúo.
Sin
entrar en la encarnizada guerra que se pretende declarar de Thunberg
contra Slat, en lo que voy a centrarme es en desacreditar el vídeo.
Así, directamente, sin paños calientes. Entre otras cosas porque a
poco que se investigue y se reflexione un poco debería
desacreditarse solo.
Tenemos
un vídeo de tres minutos y medio de dudosa procedencia (no he sido
capaz de saber quiénes había detrás, aunque la locutora hable en
primera persona) que mantiene un tono agresivo y partidista creando
dos bandos donde no los hay y defendiendo a dentelladas a uno de
ellos, con la clara intención de despedazar al contrario.
Pone
constantemente el foco en que la postura y la línea de acción de
Boyan es la correcta, y no la de Greta. Para apoyar esta tesis indica que ella ha dejado de ir a clase y ese ha sido su único logro. Primera
inexactitud descarada y voluntaria. Ella durante su secundaria
obligatoria sólo faltó a clase los viernes para llevar a cabo la
huelga que ella misma convocó, y creo que con su atención mediática
y su empecinamiento ha conseguido algo más, como por ejemplo poner
en el centro del debate el clima y todo lo relacionado con la
ecología, y la urgencia del tratamiento. Por otra parte, Boyan sí
que abandonó sus estudios de ingeniería espacial en la Universidad
Técnica de Delf en el primer curso para dedicarse por completo a
fundar y convertirse en CEO de Oceans CleanUp.
La intención constante del vídeo es satanizar a Thunberg y
santificar a Slat porque mientras una "sólo" protesta y
monta "rabietas" el otro hace cosas. Limpia los océanos con
su invento. Ya está. Estamos salvados. San Boyan nos redimirá. TODO
el problema de la situación ambiental y climática en la que nos
encontramos son los plásticos del mar. No necesitamos ir más allá
ni luchar más. Ya tenemos Oceans CleanUp por obra y gracia de
San Boyan, próximo Capitán Planeta.
Disculpad
(o no) el sarcasmo pero es que con el tono del vídeo y quienes lo
defienden y se lo tragan me pongo más incandescente que el filamento
de una bombilla.
Por
otra parte, si bien el vídeo da datos velados, ambiguos,
tendenciosos, partidistas... constantemente, es que hay otros
aspectos en los que directamente miente. Como cuando afirma que el
limpiador marino de Boyan y Oceans CleanUp recogerán según
estimaciones la mitad de los plásticos del mundo en menos de cinco
años. He buscado esas estimaciones y a lo que alude es a la mitad de
la famosa isla de plástico del Océano Pacífico, en ese mismo
plazo. Comprenderéis que no es lo mismo (matemáticamente) que lo
que el vídeo expone.
Y
así todo. Constantemente. El tono, la información, la manipulación,
la intención, el objetivo, el tratamiento... Me parece todo un
despropósito que demuestra que no hemos entendido nada.
El
propio vídeo dice textualmente con respecto a Thunberg (cuyo
apellido pronuncia "samberg", que si quieres pronunciarlo
en castellano di "tumberg" o si quieres pronunciarlo en
sueco di "sunbegg", pero no te lo inventes porque, además de
restarte credibilidad, te hace quedar en un ridículo horroroso) que
sus "rabietas sólo han generado malestar y división social".
Yo creo que más bien, estemos o no de acuerdo en la manera en la que
articula su lucha, y teniendo mil dudas sobre todo lo que se está
aglutinando entorno a ella y su figura, lo que ha generado es debate
y toma de conciencia. Estés a favor o en contra mucha más gente
está hablando sobre el tema a partir de ella que hasta hace dos
años. ¿División? Es lo que tiene el debate, que se tienen que
confrontar ideas. ¿Malestar? A nadie le gusta que le lleven la
contraria, pero madurar también es eso (la misma Greta va a tener
que aprenderlo en los próximos años y, ¿por qué no?, puede que
incluso el propio Boyan Slat).
El
tema, centrándome sólo en el vídeo respecto al contexto ecológico
y climático con los casos de Slat y Thunberg como escenario, da como
para cortar varios trajes de flamenca, pero es indudable que debemos
ir cerrando para no eternizarnos.
En
definitiva, si las ideas y soluciones que descubren y desarrollan los
"Boyans" surgidos y aún por surgir deben aplicarse a nivel
masivo hay que presionar a los poderes fácticos, administraciones y
organismos que pueden hacerlo posible, y eso hay que hacerlo saliendo
a la calle y siendo al menos tan vehementes como Greta y yo mismo. Y
por otro lado de nada sirve emprender una lucha política al respecto
de ningún ideal por parte de todas las "Petras Kelly" y
"Gretas Thunberg" que hayan surgido y estén por nacer si
no existen alternativas reales listas para poner en marcha en cuanto
se tome el poder, y que puedan haber sido ideadas y preparadas por
todos los otros "Boyans". Veis por dónde voy, ¿verdad?
No
se trata de elegir irreconciliablemente un camino u otro, generando
(así sí) malestar y confrontación, sino de converger la lucha
activista y política con las iniciativas reales y técnicas. Tengo
una curiosidad tremenda por saber qué opinan Greta y Boyan la una
del otro y viceversa.
Las
consideraciones y análisis sobre si uno o la otra o ambos son
marionetas del capitalismo y poderes oscuros que los/nos manejan ya
darían como para otro artículo específicamente. Artículo que
probablemente nunca llegue a escribir.
Por
último no quiero dejar de destacar la incoherencia en la que cae el
vídeo que nos ocupa al tener como espacio sonoro de fondo constante
The show must go on de Queen dando a entender que el caso
Greta no es más que circo, y dejándolo literalmente claro durante
el último minuto del vídeo, echando mierda en una orgía de
vertedero ideológico ya no sólo sobre Greta sino sobre todos los
grupos, personas y entidades activistas que salen a la calle a
protestar en favor de la salvación del planeta y el clima en el que
no nos queda más remedio que vivir y que es de todo el mundo (de la
gente de derechas también. No defenderlo es autodestructivo). Es
decir, que critica el elemento performántico que toda protesta
debería utilizar para captar la atención de los receptores del
mensaje y los participantes de las acciones... haciendo exactamente lo
mismo. Porque este vídeo, al final, es su propio espectáculo. Pero
a ellos, a quienes están detrás de la pieza, sólo les gusta su
espectáculo.
Pues
bien, si todo esto les parece un espectáculo, temo decirles que nos
van a tener enfrente y voy a tener que darles la razón SÓLO en una
cosa. El espectáculo debe continuar. Por el bien de todo el mundo.
Por el suyo también.
Salu2.
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